El informe también destaca que, pese a la gran aceptación de estas herramientas entre ellas, compartir datos financieros, perder dinero y dudas sobre la seguridad son los mayores puntos de preocupación.
Si bien los pagos electrónicos han estado masificados durante varios años, fue a partir de la crisis sanitaria del 2020 cuando más personas se vieron obligadas a adoptar las nuevas formas de transacciones y pagos en línea para sumarse rápidamente a la economía digital. En el caso de América Latina y el Caribe, un reciente estudio de Kaspersky reveló que esa situación llevó a que más mujeres se acercaran a servicios de la banca digital, convirtiéndolas en el grupo de mayor adopción permanente de este tipo de transacciones en la región.
La encuesta titulada “El estado del uso y la seguridad de pagos digitales en América Latina” de Kaspersky, en conjunto con la consultora de estudios de mercado CORPA, analiza las interacciones de los usuarios con los servicios de pagos digitales y sus actitudes hacia ellos con el objetivo de comprender los factores que impulsarán aún más o frenarán la adopción de esta tecnología.
Uno de los principales hallazgos señala que el 35%[VA1] de las mujeres, frente al 29% [YV2] de los hombres, comenzó a utilizar los servicios de la banca en línea o billetera digital durante la pandemia. Si bien el 43%[VA3] comentó que lo hizo porque no tenía otra opción, el 55% [VA4] de las encuestadas señaló como principal motivo la seguridad y la conveniencia de las transacciones.
Sin embargo, el informe deja claro que las preocupaciones alrededor de la ciberseguridad de estos servicios siguen siendo una de las razones que obstaculizan su plena adopción. Según la encuesta, el miedo a perder dinero en línea es una de las inquietudes más nombradas entre las entrevistadas. La encuesta señala que las guatemaltecas son las que más se preocupan sobre esto (43%), seguidas por las peruanas y mexicanas (ambas con un 36%). Un tercio de las encuestadas de Costa Rica (34%) también se preocupa por esto, seguidas por las encuestadas de Colombia (33%), Panamá (28%), Argentina (23%), Chile (21%) y Brasil (20%).
En cuanto a los motivos por los cuales no usaban los pagos digitales anteriormente, la razón más citada fue el temor por compartir datos financieros en línea[VA5] (40%). Nuevamente, las guatemaltecas son las que más preocupación expresaron sobre esto (53%), seguidas por las peruanas y colombianas, ambas con un 45%. A ellas le siguen las mexicanas (43%), panameñas (41%), costarricenses (38%), y brasileñas (35%). Finalmente, las argentinas (30%) y chilenas (29%) fueron las que mostraron menores reservas.
La encuesta también reveló que el 20% de las mujeres de la región no confía en la seguridad de la banca en línea y las billeteras digitales, siendo las colombianas las que más desconfían (30%). Le siguen las peruanas (25%), las mexicanas (24%), luego las argentinas (20%). En menor porcentaje, le siguen las chilenas (19%), guatemaltecas (19%), panameñas (17%), brasileñas (16%) y costarricenses (13%).
“La seguridad siempre será un punto clave cuando hablamos de métodos de pago, ya que nadie quiere correr el riesgo de perder su dinero. Es curioso ver el papel que la crisis sanitaria tuvo en impulsar a las mujeres a acercarse a los servicios financieros en la región. Aunque la investigación muestra que la conveniencia fue una de las razones más citadas para su uso, también recalca que esto por sí solo no garantiza su adopción. La lección aprendida es que la confianza en los servicios y herramientas digitales es una prioridad para las usuarias, y es algo que los proveedores deben de tomar en cuenta”, comenta Fabio Assolini, director del Equipo de Investigación y Análisis para América Latina en Kaspersky.
Para ayudar a que más mujeres se acerquen y adopten la banca y billeteras digitales de manera segura, Kaspersky ofrece las siguientes recomendaciones:
Información adicional sobre “El estado del uso y la seguridad de pagos digitales en América Latina”, puedes ingresar aquí.
Sobre el estudio
La investigación de tipo cuantitativo incluyó los países de Chile, Perú, Brasil, Colombia, México, Argentina, Panamá, Guatemala y Costa Rica. Las respuestas se recopilaron entre septiembre y octubre de 2022, entre un total de 2894 personas, de entre 25 y 65 años, del grupo social económico C1C2 Y C3D, todos usuarios de dispositivos móviles y de banca digital.